Opinión en la pantalla grande

Un potente thriller de supervivencia basado en uno de los peores eventos terroristas en la memoria de Estados Unidos, y una de las más temibles películas de terror del año: Día del atentado y La morgue.

Por: Iván Darío Hernández Jaramillo

Día del atentado

Causa mucho terror tener que pensar en la zozobra y la impotencia que tuvieron que vivir cientos de ciudadanos durante uno de los peores actos terroristas perpetrados en los Estados Unidos: el bombardeo durante la maratón de Boston en 2013. Causa aún más miedo pensar que los culpables del repudiable acto se declaraban como mártires del Islam sin ni siquiera ser musulmanes (en realidad eran chechenos).

Día del atentado es una película muy dual; por una parte, es un retrato de supervivencia increíble de los ciudadanos de Boston y de toda la fuerza policiaca y de agentes del FBI intentando prevenir otro acto terrorista por parte de los responsables de la masacre durante el evento deportivo; y por otro lado, es una cinta que llega al país justo cuando la xenofobia anda exacerbada y existen políticas internacionales que vulneran los Derechos Humanos y que son orquestadas por Donald Trump.

Digamos que es una fantástica película, llena de tensión, muy bien narrada y que llega al corazón de los ciudadanos justo en un momento en el cual nadie debería estar expuesto a más mensajes de odio racial y religioso.

La morgue

Intensísimo y muy efectivo cuento de terror al interior de una siniestra morgue, en la cual un padre y su hijo reciben el cuerpo de una mujer sin identidad alguna. La autopsia se sale de control y nosotros como espectadores quedamos totalmente expuestos en un entorno de pesadilla que nos va enredando y absorbiendo, en una incómoda oscuridad que nos recuerda por qué es tan desagradable tener que hacerle frente a la falta de luz y al vacío justo cuando un mal sueño nos acecha.

Lo que sucede es fascinante, una absoluta clase magistral de cine, con muy poco presupuesto, y narrada con tal fidelidad a las grotescas sensaciones que nos desea impregnar, que es imposible alejar la mirada de la pantalla a pesar de que reconocemos, conforme se va desarrollando la historia, que lo que estamos viendo es absoluta y deliciosamente funesto. Gran película del género.